Se alinearon los planetas. Los 3 comileros pudimos vernos las caras durante un día entero. Si no es por el trabajo de uno, el tema de los turnos y los domingo que trabajo. Era muy complicado de vernos así que no desaprovechamos la oportunidad. Playa + almuerzo.
La playa, el charco de la Paloma, una pequeña piscina natural cerca del puertillo. Día clarito, sol, el agua entraba y metía agua fría, sueño, baño y nos entró hambre. Y nos tuvimos que mover. El Kawamba cerrado, con horario súper raro, al menos para la gente de Las Palmas. Decidimos coger el coche y movernos. Pasamos cerca del Pepe Chiringo, de los 3 o cuatro que ya quedan. Hoy tocaba comer bien. Y nos paramos en San Felipe, una pequeña caminata y entramos en El Paso.
Hace tiempo que no comíamos unas papas arrugadas así, y del mojo mejor no hablar. De ese que pica y está en su punto Se agradece que el primer encuentro sea tan bueno.
Una de pimientos de padrón no puede faltar si está en la carta. Le faltó un poco más de sal gorda pero bueno. El queso frito pasó la revisión. Le dimos un aprobado alto. Un queso con sabor y no de esos que se acostumbran a ponernos el queso sin sabor ninguno que lo único que tiene de diferente en el paladar en la salsa de mermelada. Como dije en su momento, las cocinas tienen que arriesgar y meter sabores diferentes (la salsa de pimiento que probé en su día en el Agüita).
Los dos primeros platos fueron gambas al ajillo. Nada de las pequeñeces que nos ponen en algunos locales. Aquí grande. Con su ajitos fritos. Para mojar el pan. Más tarde, los calamares. En la carta había las tres formas. A la romana, fritos y el otro no me acuerdo 😝. Bien cargadito, veníamos con hambre, nos espetó el camarero. Y así era. Nos comimos hasta la ensalada, con la cebolla roja, de esa que duele cuando baja y sueltas esas lágrima. Así de buena estaba.
Cuando estábamos pidiendo, queríamos algo de pescado. Yo la verdad es que no soy mucho de pescado, más bien por el miedo de las espinas. El camarero nos recomendó espalda de cherne (rápido, limpio y rico). No preguntamos el precio, o más bien si. Le dijimos que cuanto era, y nos comentó que va por peso. Fueron 30€ en el pescado, con su acompañante. Dolió, pero bueno, una vez no hace daño. Y fíjate, que con la carne no me hubiera pasado eso porque ya sé el precio y como nos manejamos. Este era un terreno que no podía controlar pero bueno, que se le va a hacer. Nos fuimos con un sabor agridulce pero llenos y es algo difícil de conseguir.
Os dejo con la foto mía pasando un calor que rajaba las piedras. Por si alguien se pregunta que es la fórmula, se trata de la ecuación de Lorenz. Aparece en sistema no lineales que tienen una gran sensibilidad a las condiciones. Para los menos entendidos puede que le suene La Teoría del Caos. Cómo un pequeño cambio al inicio puede dar un resultado totalmente diferente (efecto mariposa, como el aleteo de una mariposa puede provocar un tornado en la otra punta del mapa).
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